Es temprano en la mañana en la región de Bucklige Welt cuando cambio por primera vez entre los dos contendientes. A la izquierda, la Kawasaki Z900 SE en su clásico verde; a la derecha, la Honda CB1000 Hornet SP en un discreto negro y gris. Solo 154 euros separan a estas dos naked bikes: en Alemania, la Kawasaki cuesta 12.145 euros, mientras que la Honda cuesta 12.299 euros. Una diferencia de precio que no alcanza ni para un juego de neumáticos. Sin embargo, las filosofías detrás de estas máquinas no podrían ser más diferentes.
Las cifras hablan claramente: 124 CV para la Kawasaki frente a 157 CV para la Honda. Son 33 CV de diferencia, una gran diferencia en papel. Pero, como suele pasar en la vida, las cifras en bruto solo cuentan la mitad de la historia. Mientras la Honda presume con su fuerza bruta, la Kawasaki responde con su sofisticación electrónica y una suavidad que convence.