Yamaha R1 2015 vs. Kawasaki Z1000 2018

Yamaha R1 2015

Kawasaki Z1000 2018
Visión general - Yamaha R1 2015 vs Kawasaki Z1000 2018

Yamaha R1 2015

Kawasaki Z1000 2018
Especificaciones técnicas Yamaha R1 2015 en comparación con Kawasaki Z1000 2018
Comparación de ventajas e inconvenientes
Comparación de ventajas e inconvenientes
Yamaha R1 2015

La nueva R1 es un gran paso adelante respecto al modelo anterior. Ésta se consideraba una buena moto de carretera y se requería una gran inversión para los viajes al circuito. Ahora es al revés. La nueva R1 se ha desarrollado con un claro enfoque hacia la pista de carreras. El paquete electrónico es sobresaliente y los amantes de la tecnología sacarán partido a su dinero. Los fans de Yamaha prácticamente tienen que ir a por ella, por fin tienen una moto digna. La R1 tiene ligeras debilidades al frenar - aquí se vuelve algo inestable. Si quieres comprar una moto de carreras lista sin tener que trabajar en la suspensión, es mejor ir a por la R1M. La suspensión electrónica de Öhlins funciona perfectamente y no tiene puntos débiles. El segundo punto débil de la R1 también se puede solucionar fácilmente para su uso en circuito. El agujero de par en el centro se puede solucionar fácilmente con un nuevo mapeado.
Kawasaki Z1000 2018

La Kawasaki Z1000 (2014) es una declaración contra la tendencia electrónica de su tiempo, y eso es exactamente lo que la hace especial hoy en día. Su característico motor de cuatro cilindros, su mecánica directa y su enfoque sin concesiones en lo esencial tocan la fibra sensible en una época en la que muchas motos se han convertido en ordenadores rodantes. Sí, prescinde de los modernos sistemas de asistencia y de una perfecta protección contra el viento. Pero ofrece una auténtica experiencia de conducción naked, combinada con la fiabilidad japonesa y unos costes de mantenimiento razonables. La Z1000 no es una máquina para adictos a las hojas de datos o fanáticos de la electrónica - es una moto para gente que todavía quiere tomar sus propias decisiones cuando conduce. Una moto honesta y con carácter que sigue inspirando incluso después de años y que cumple con creces su papel de alternativa emocional a la era moderna digital.