Reseña de Experiencia: Daytona Road Star GTX

Ahora, después de todos estos años, llegó el momento de adquirir un nuevo par y reflexionar sobre el pasado. No porque el viejo se haya vuelto completamente inútil, sino porque empezaron a aparecer signos de envejecimiento que, después de tanto tiempo, uno simplemente debe aceptar. Es un buen momento para recordar los innumerables viajes en las más variadas condiciones climáticas y destacar lo que hace a estas botas tan especiales.

El Road Star GTX es una bota de alta calidad en todos sus aspectos. Todo comienza con el material: cuero de vaca grueso y resistente que no es ni demasiado blando ni demasiado rígido, proporcionando una sensación directa y segura al conducir. Este cuero no solo resiste las cargas mecánicas, sino también el paso del tiempo. Aunque con los años mi vieja bota ha desarrollado una pátina, el cuero nunca se volvió quebradizo ni se rompió. Solo el protector de cambio de plástico en la parte superior del pie se despidió en su última salida en la pista de Supermoto. Sin embargo, seguiría siendo completamente funcional.

En el interior, una membrana GORE-TEX® garantiza que se mantenga seco, y lo hace de manera confiable. He estado con las botas bajo lluvias torrenciales, tanto en los Alpes como en la vida cotidiana, en carreteras secundarias y autopistas, y siempre he tenido los pies secos. Solo después de más de 15 años, de vez en cuando, algo de humedad logró pasar. Aun así, la membrana ha durado increíblemente.

Lo que destaca positivamente del Road Star GTX es su comodidad. Comienza al ponérselas: dos cremalleras laterales facilitan mucho el proceso de poner y quitar, incluso con calcetines gruesos o pies más anchos. He usado las botas en trayectos cortos al trabajo, en recorridos de varias semanas y tanto en calor como en frío. Nunca tuve ampollas, puntos de presión ni pies cansados. Incluso al caminar, como en paradas intermedias o visitas, la comodidad era buena, aunque naturalmente no comparable a unas botas de senderismo. Sin embargo, las botas siempre me han impresionado en términos de movilidad y sensación con las estriberas y el cambio. Desde el principio son bastante flexibles, pero una vez ajustadas, se sienten casi como zapatillas de deporte. Esta es también una razón por la que nunca quise reemplazarlas.

En términos de seguridad, el Road Star GTX es un verdadero peso pesado. Las refuerzos en las áreas del tobillo, el cambio y el talón brindan una sensación de seguridad sin resultar rígidos. La suela es adherente, incluso en condiciones de humedad, y nunca se ha despegado ni vuelto quebradiza. Solo en una parada en una gasolinera con el suelo lleno de gasolina y aceite casi tuve un deslizamiento al ir a la caja, pero eso se debió más a que "quien bien lubrica, bien resbala" y no realmente a la bota. También merece un elogio especial la estabilidad al conducir de forma deportiva. Aunque el Road Star no es una bota de competición, la he llevado en varios eventos de pista. Claro, eventualmente alcanza sus límites, sin deslizadores ni protecciones rígidas, pero para trackdays ocasionales es más que suficiente. Siempre tuve la sensación necesaria con la moto, buen agarre en las estriberas y nunca una sensación de inseguridad.

El mayor punto a favor, y mi razón personal para este informe, es la increíble longevidad. 20 años, muchos miles de kilómetros, todas las estaciones, innumerables cambios de clima, suciedad, lluvia, sol, sal. Estas botas han soportado todo. Las he cuidado ocasionalmente, limpiado, engrasado, pero nunca les he dado un tratamiento especial intensivo. Y, sin embargo, han aguantado hasta hoy.

Por supuesto, ya no son las más bonitas estéticamente, las suelas muestran desgaste, las cremalleras últimamente se traban un poco, y la membrana Gore-Tex ya no es completamente impermeable. Pero eso, después de tanto tiempo, no solo es comprensible sino impresionante. No es de extrañar que quisiera exactamente estas botas de nuevo. Lo que me alegró mucho fue el hecho de que, después de tanto tiempo, todavía están disponibles casi sin cambios. En nuestra época es raro que un producto permanezca en el mercado durante tanto tiempo con tan pocas modificaciones. Lo que ya era bueno antes, no necesariamente debe cambiarse.

Unas botas como las Road Star GTX no son precisamente una ganga. Actualmente, el precio (año 2025) oscila entre 400 y 480 euros, dependiendo del proveedor. Sin embargo, si se considera la relación con su durabilidad y calidad, queda claro que no es un producto caro, sino una inversión. Calculado a lo largo de 20 años, las botas cuestan aproximadamente 20 euros al año. Para algo que debe funcionar perfectamente en un equipo de seguridad, eso es excelente.

El Daytona Road Star GTX no es un "lujo de diseñador" ni una bota para carreras profesionales en pista. Pero es lo que muchos motociclistas desean: un compañero confiable que funcione durante muchos años. Protege, mantiene caliente y seco, es cómodo y dura casi eternamente, ya sea en rutas, en la ciudad o en la pista. ¡Que vengan los próximos 20 años!